jueves, 26 de noviembre de 2015

ESE LUGAR

Y de nuevo ese lugar, ese lugar que me hace vibrar, que me hace sentir, que me empaña la mirada y me alegra el corazón. Tantos sentimientos que se encuentran en un ir y venir de circunstancias, tantos sentimientos que fluyen desde los más hondo de mi ser y me hacen querer estar allí, querer volver una y otra vez, acariciar la felicidad. 
Recuerdo a Scarlett O'Hara y su famosa frase en la película Lo que el Vient0 se llevó: "¡A Dios pongo por testigo que jamás volveré a pasar hambre! y me dejo llevar de esa efusividad y esa promesa firme para, sin poner nada ni nadie por testigo, simplemente mi verdadera convicción de que jamás volveré a dejar que nadie enturbie mis recuerdos, mi pasado y mi presente en un lugar tan especial, un lugar para reencontrarme a mi misma, para disfrutar de cada minuto en él con todos los sentidos bien despiertos, sin que nadie interfiera esa relación profanando algo tan sagrado.
Pronto nos veremos, olvidando algún mal momento pasado, olvidando a quién nunca debería haberme acompañado a tus raices, que son las mías, convirtiendo lo que deberían haber sido días magníficos en un auténtico suplicio, y todo ¿por qué? No tengo la respuesta, solo se que no tendría que haberlo permitido, que aunque han pasado varios años lo recuerdo con total perfección por lo que ello supuso en su momento. Pero que ahora estoy feliz de pensar en lo que todo eso me enseñó, la sombra pesada y oscura que desapareció de mi, que necesitaba que desapareciera, que me ha permitido ser libre y ver claramente tantas cosas... que no tengo palabras para explicar lo que siento, puede que un compendio de tantas cosas sea algo parecido a la felicidad. Puede.


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